Agro y ganadería
Por Marcelo Vera , 4 de diciembre de 2023 | 13:04SAG en estado de alerta: los riesgos del virus de encefalomielitis
Atención: esta noticia fue publicada hace más de 12 mesesLa académica UOH Gemma Rojo explica que la Encefalomielitis Equina del Oeste (EEO), detectada en Argentina, es una zoonosis transmitida por vectores que tiene una baja probabilidad de afectar a la población humana en Chile.
La confirmación, por parte del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria de Argentina, de un brote de Encefalomielitis Equina del tipo Oeste, puso en alerta al Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Chile, por la posibilidad de que esta enfermedad -que afecta a equinos y humanos- pueda traspasar la frontera.
La Encefalitis Equina es una enfermedad que es transmitida a estos animales por picadura de insectos (vectores), los que tras haber picado a roedores silvestres o aves infectadas obtienen el virus. Se trata de una zoonosis, ya que puede afectar al ser humano, no por contacto con un equino enfermo, si no que a través de la picadura de insectos portadores del virus.
En el caso de los equinos, la sintomatología se caracteriza por la presencia de fiebre, anorexia, cambios de conducta y depresión intensa. En los casos graves, puede evolucionar hacia la hiperexcitabilidad, ceguera, ataxia, depresión grave, postración, convulsiones y muerte.
¿Qué causa en humanos?
Según explica la académica del Instituto de Ciencias Agroalimentarias, Animales y Ambientales (ICA3) de la Universidad de O’Higgins (UOH), Gemma Rojo, lo que pueda causar este virus en humanos dependerá del tipo de virus de Encefalomielitis.
“Para el virus de la Encefalomielitis Equina del Oeste (EEO), la sintomatología es inespecífica (un malestar parecido a una gripe), y -a veces- con sintomatología nerviosa. Tiene una fatalidad del 7%”, explica la académica.
Agrega que la enfermedad si bien –normalmente- no se puede contagiar entre humanos. “Existen informes de transmisión transplacentaria, con la consecuente infección por vía congénita en los neonatos”, señala la Dra. Rojo.
¿Existen vacunas? Según explica la académica UOH existen vacunas en animales y estas son seguras e inmunogénicas. “En Chile, esta vacuna no se encuentra registrada, ya que las Encefalomielitis Equinas son enfermedades exóticas para nuestro país, por lo que no hemos necesitado de ella. En caso de que esta enfermedad llegue a presentarse en el territorio, existe un protocolo de facilitación para que puedan importarse vacunas”.
La especialista señala que no existe un tratamiento antiviral específico, “por lo que las medidas de atención primaria para mantener las funciones vitales recomiendan reposo absoluto, hidratación adecuada y terapia sintomática”.
La académica destaca el hecho que el SAG activó de manera inmediata un plan de trabajo que intensifica la vigilancia sobre equinos que se movilizan hacia Chile desde el extranjero, así como también de la población equina nacional. “Se trata de vigilancia clínica con especial énfasis en las regiones de Arica y Parinacota y Tarapacá e Rapa Nui, donde existen más riesgos de encontrar los mosquitos que podrían ser vectores de esta enfermedad”, indica.
Agrega que Chile se distingue históricamente como una 'isla sanitaria', gracias a sus barreras geográficas naturales y a rigurosos controles sanitarios en sus fronteras. “En relación con la Encefalomielitis Equina del Oeste (EEO), detectada en Argentina, es importante destacar que, aunque la EEO es una zoonosis que podría afectar a los humanos, el riesgo en Chile es considerablemente bajo. Esto se debe a la ausencia en nuestro territorio de los mosquitos vectores de esta enfermedad, que son propios de regiones tropicales y que no se encuentran normalmente en Chile. Si bien es cierto que en algunas regiones específicas podría existir el riesgo de presencia de estos insectos, nuestra posición sigue siendo excepcionalmente favorable. Las medidas preventivas, diseñadas para minimizar el riesgo de contagio tanto en equinos como en humanos, reflejan el firme compromiso de nuestro país con la protección de la salud pública”, finaliza.